Dialéctica de la conciencia o encontrar el conocimiento del bien

Una de las preguntas más recurrentes estos últimos meses es el porqué escoger a José Revueltas como tema de mi tesis o peor aún: ¿Quién es José Revueltas? ja bueno eso no importa.

A lo mejor alguien que lea esto encontrará un poco aburrido, tedioso o simplemente no pasarán de este renglón.

Si sobreviviste a este tercer párrafo entonces estás interesado en algo que a mí me ha dejado incluso sin dormir (literalmente y no).

La dialéctica es un concepto que con el devenir de los siglos se convirtió en un problema semántico. Vil estupidez de los tiempos que descompone todo. Pero Hegel y después Revueltas concretaron el concepto como originalmente fue concebido y lo llevaron a un planteamiento “Absolutamente moderno” o como dijera SUS: “Absolutamente 2.0”.

La dialéctica tiene su fundamento en la paradoja (confrontar dos conceptos opuestos y que no pueden existir el uno sin el otro) y para ser más clara trataré de ponerlo así:

Hay un eje principal conformado por varios ejes concéntricos que giran alrededor en armonía y yuxtapuestos. Existe una fuerza aplicada en cada eje que gira alrededor del central, este eje periférico lucha y muchas veces se vuelve central poniendo así en conflicto todo el sistema de ejes.

Aquí el problema radica en que cada eje debe realizar dos ejes acción: pensar y adquirir el concepto o conocimiento; y llevarlo a la práctica. Cada acción cometida por lo tanto tiene diversas reacciones y resultados en los otros ejes periféricos (armonía y yuxtaposición).

Revueltas estaba preocupado por las dos primeras acciones del eje y de una manera mejor dicha los ejes periféricos somos los seres humanos que giran en el eje principal que es la vida. Si cualquier ser humano piensa acciones y las realiza afecta a un tercero y a su vez estos a los demás seres humanos. Buscaba una conciencia social en donde los seres humanos pensaran en conceptos universales del bien y aplicados en masa crearía una sociedad mejor.

Pero lamentablemente el ser humano se preocupa primero por sus necesidades, por su YO, por lo que pueda sacar de un tercero, el maldito beneficio personal. Bueno tampoco quiero ser una idealista ni mucho menos dármelas de un buen ser humano, pero sería bueno que pensáramos en los demás y dar más allá de lo que le puedas dar a una persona, vivir para el OTRO.