miércoles

En la sangre

Me preguntas cómo me siento. No lo sé. ¿Me contestas o te contesto? Siempre es arriba, y cada vez más grande. Respirar es difícil, siempre hay alguien que ocupa su lugar: está ahí mirándome desde arriba, sí es ello, esto.

Se ríe de mí, me aprieta y me dice que todo estará bien. No quiero. No quiero. No quiero.

Está conmigo y contigo y con nosotros. ¿No te parece maravilloso? Un mundo en tu ojo derecho, otro en el izquierdo. Todos juntos en un camino que se acorta, que te invita a pasar.

Acepta, uno, dos, tres, cuatro, ¿puedes verlo? ¿Por qué te sintes sola? Siempre estuvimos contigo, sólo necesitabas llamarme, cuatro, tres, dos, uno. Acepta.

No, no te estás volviendo loca.


Rito

Bajo centinelas esperar el atardecer tibio verde, amarillo y gris brilla, brilla, brilla en la punta. Caminar en línea encontrar las s...